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Pablo Carrazana

Poemas inéditos- Pablo Carrazana




Selección de poemas


pregunto a mis plantas


¿qué quiere hacer con ustedes

este viento

que como un puño

golpea?


no sé solo sé

que las miro y me deslumbra

la fuerza de sus hojas

desnudas temblando frágiles

pero también hermosas

gestos que ustedes me regalan

para que pueda atravesar el invierno


un helecho un sicomoro

una suculenta un jade

un jazmín

todas quebrando

el aroma que sale

del pucho que fumo

a ella le dije

será el último

ya lo verás


y a ustedes también les digo

es el último

ya lo verán


pero ustedes desde su postura

me acompañan a mirar

todas las tardes

la trayectoria suave

del sol en caída

dibujando el cielo

naranja primero

después rojo

como un fueguito

que alguien enciende

contra el frío


¿qué quiere hacer con nosotros

este viento

que como una flecha

lastima?

no es el invierno

no es el miedo

de que esta flor

saliendo de mí pecho

pueda marchitarse


si también la riego

con amor

como a ustedes

pero entonces

¿qué quiere hacer este viento?

con ustedes

y conmigo

¿qué quiere?

¿de dónde viene?



confesión del hombre de nieve


no debo creer que existe en mis ojos

o en el centro de mi pecho

un tesoro

que pueda perderse ni bien

este sol me acaricie


no debo ni pensarlo pero

en el más gélido día

mientras hombres y mujeres y niños

van y vienen

como en una tarde única igual

a todas mis tardes

miro las sonrisas que pasean

frente a mis ojos


ellos no saben

que todo esto es frágil y milagroso

mírenme sino

temblando

mientras ese fulgor

crece en mi pecho

lo quiebra

con dulzura.


s/t


¿a dónde se fue el jazmín que

como enredadera

crecía escapaba de tu pecho?


acaso lo mató

la helada la mano fría

que ya no acaricia

mano que no dice nada

no escribe

no tiembla


acaso esa mano

es la dueña del espacio vacío

donde crecía un jazmín

y ahora ni hojitas ni aroma

solo un murmullo el del viento

entrando saliendo

por una hendidura

un hueco

en tu pecho abierto

como una ventana rota

por donde ya no se asoman más

jazmines

por donde ya no entrarán más

luminosas aves


s/t


a veces dejo que la casa

se pueble de sonidos frágiles y azules

que corren de acá para allá

como pequeños gatos inquietos

figuras secretas en mi noche

que se acurrucan

contra el frío

una al lado de la otra

con cadencia

en armonía

y la soledad

o el hueco grande de la casa

se hace chiquito

se cierra

con ese mismo acorde

que suena desde las cuerdas estirándose

escapando

para zurcir un remiendo

parchar el corazón

en punto santa clara.


nueve modos de mirar una nube


i.

cuando salgo temprano

en las mañanas

me retienen


ii.

otras veces se esconden

debo buscarlas

camufladas bajo la forma

de algo que pierdo

cada vez que suena la alarma


iii.

nubes frágiles

inútiles signos del cielo

en el cielo

para decir mensajes importantísimos

y por eso también frágiles


iv.

podrían decir lo que pretenden decir

de forma más precisa

pero si lo hicieran

ya no serían nubes


v.

no hay que hacer mucho esfuerzo

por encontrarlas

juegan con las aves

se trenzan en los árboles

y hay que ayudarlas a volar


vi.

tampoco hay que menospreciarlas

una nube una vez

hizo que se estrellara un avión


vii.

a veces están en el lugar equivocado

en el momento equivocado

justo justo

cuando las descubro


viii.

decir que es culpa de las nubes

no es excusa


ix.

existen

hombres torpes ingenuos

que usan toda una vida

para dar caza a una nube

que siempre siempre se escapa


al vesre


sentado en la plaza

siento

el roce cálido del viento

sobre mi cuerpo


es una caricia

me digo

un regalo de la primavera

que se aproxima


a veces lo invisible

es esencial

a los ojos


cuando fui árbol


no me asusté del invierno

pasé las horas

en el páramo de luz

que me daba el balconcito


dejé que el sol

esa ave inquieta

se posara

sobre mí


ese pájaro

había volado mucho

había atravesado distancias

bocas oscuras

como fauces

depredadoras

y ahora

había llegado hasta mí

eligiendo el pecho

en esta época

de luz frágil

para juntar ramitas

y anidar


no le importó que fuera árbol

de pie y sobreviviendo

perdiendo hojitas

en la casa que dejaste vacía

no le importó por eso

dulce ave

gracias por el nido

para atravesar el frío

y su puñal

gracias

por la compañía

cálida como un recuerdo

lo sostengo en alto

es un fruto dulce

que sobrevivió a la helada

y aunque ya no soy árbol

florezco.


s/t


no es de nadie sino mío

el arbolito

despojo triste

que con alegría una vez

me regalaste


un día detuvo su crecer

sus frágiles ramas

en un gesto alto hacia el sol


¿por qué?

¿qué buscabas bonsai

con aquel gesto?


lo mismo que yo seguramente

intentar alcanzar el cielo

acariciarlo


pero acá quedamos

ese pequeño árbol seco

y yo

sobreviviente en la derrota


querido arbolito

serás sustrato

el más dulce

para la tierra

que habrá de abonar

los días que vendrán


___



Pablo Carrazana : Buenos Aires (1992). Es profesor de lengua y literatura de nivel medio. Asiste al taller de poesía de Osvaldo Bossi. Algunos de sus poemas y cuentos fueron publicados en diversos medios digitales. Actualmente se encuentra trabajando en su primer libro.


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